Salida a Cazorla – 11 de marzo de 2017

© Javier Tamargo

Texto: Francisco A. Vicaria Rumín

Mañana apacible la que se presentaba a los socios de AFOAN que se animaron a salir el pasado sábado 11 de marzo al Parque Natural Sierra de Cazorla, Segura y Las Villas, con la intención de fotografiar zorros y buitres, pero sobre todo, echar una jornada de convivencia de las que tanto hacen falta en un grupo de socios y amigos.

Tras acoplarnos en varios coches, con la organizadora de la salida a la cabeza, nuestra socia Miriam, partimos hacia el punto de encuentro, una churrería en La Iruela, donde nos esperaban Tomás y Carolina, expertos conocedores del terreno y  buenos anfitriones, como no esperábamos menos. Posteriormente, tras dar buena cuenta del desayuno y agradables conversaciones, nos dirigimos a nuestro destino, una zona donde los zorros suelen aparecer por costumbre y como suele pasar en estos casos, a los que los aficionados a la fotografía de naturaleza ya estamos acostumbrados, que cuanto más organizado tienes una cosa siempre falla algo, los muy zorros no aparecieron en el lugar previsto…

© Miguel Fuentes Expósito

Tras un rato de espera, nos movimos un poco por la zona y por fin ¡zorro a la vista!. Pobre animal, debería de estar muy hambriento para acercarse a un grupo de unas 25 personas, “armados” hasta los dientes. Empezamos por tanto, a sacar las primeras fotografías del primer objetivo que nos habíamos marcado.

Una vez que el animal se marchó, bien comido, como debe ser, continuamos el viaje, hasta los cortados de “El Chorro”, siguiente objetivo: fotografiar vuelos de Buitre leonado. A medio camino, se paró el primer coche de la expedición AFOAN, causando un atasco monumental en plena subida al “Chorro”, el motivo: ¡un zorro más hambriento aún que el primero! Parecía ser un profesional de esto, pues posaba, miraba, y como no, comía para reventar. Por un momento pesé…a este zorrete le va a dar algo…En ese momento me di cuenta, de que el viaje ya había merecido la pena.

Continuamos nuestra ascensión y ahora éramos nosotros los que estábamos más hambrientos que nuestros amigos los zorros. Compartimos mesa y mantel “tipo picnic”, aunque ciertamente unos iban mejor preparados que otros, no quiero dar nombres…

Mientras almorzábamos, los buitres empezaron a volar sobre nuestras cabezas poniendo nervioso a más de uno. A lo lejos los veíamos como planeaban aprovechando las corrientes térmicas sin apenas mover las alas y caían empicados para entrar las buitreras situadas en aquellas paredes verticales de roca caliza, ¡qué pasada!

© Miguel Fuentes Expósito

Una vez comidos y cámaras en mano, nos dirigimos a los cortados donde estaban las buitreras, y como suele pasar en estos casos planificados…ni un solo buitre cercano. Tan solo las Chovas piquirrojas permanecían ante nuestra presencia, volando y haciendo caídas en vertical a una velocidad sorprendente. Supongo que, el que el grupo fuera numeroso, por muy acostumbrados que estén los buitres a la presencia humana, algo debe influir en su comportamiento. Tras esperar un rato, empezaron a aparecer los primeros individuos más confiados, un poco lejanos para lo que según me comentaron algunos compañeros se pueden fotografiar en esta zona. Impresionante ver como estas aves son capaces de aprovechar las corrientes de aire, sin apenas gastar energía, sólo baten las alas para despegar y para usarlas como freno una vez llegan a su destino, las buitreras. Desde el punto de vista fotográfico las condiciones no fueron las óptimas, un sol de justicia y un fuerte contraluz nos dificultaba la tarea. Seguramente no salgan las mejores fotografías de buitres de este viaje, pero verlos llegar a lo lejos, extendiendo las patas como si fueran un avión al desplegar el tren de aterrizaje, sólo eso, ya merece la pena.

Una vez  que ya desaparecieron y tras compartir opiniones entre unos y otros de cómo había ido el día, empezamos a retirarnos hasta los coches para emprender el viaje de vuelta. Sin embargo, los que apuramos el tiempo al máximo, empezamos a observar como el horizonte iba cogiendo unos tonos maravillosos, lástima que la mayoría de los que quedábamos solo llevábamos el teleobjetivo y no disponíamos de tiempo para ir al coche y volver con un angular para reflejar lo que estábamos observando, aún así hicimos algunas tomas.

En ese preciso momento, disfrutando de la fotografía, con una temperatura agradable, en aquellos cortados a más de 1.300 metros de altitud, en aquel lugar maravilloso, y con esos tonos que iba cogiendo el horizonte con el valle y sus montañas al fondo, parecíamos estar… “UN POQUITO MÁS CERCA DEL CIELO”.

© Francisco A. Vicaria Rumín

© Francisco A. Vicaria Rumín

VI edición de Andújar Flamenca

© Vicente Toribio

Un año más se ha celebrado la VI edición de Andújar Flamenca y como no podía ser de otra forma, los fotógrafos de AFOAN asistieron para captar con sus cámaras la belleza de los trajes que pasearon por la pasarela.

Por las condiciones meteorológicas adversas del día, hubo que modificar el enclave, y no pudo hacerse en el marco incomparable donde se ha realizado en años anteriores, la Plaza de España, rodeada de obras arquitectónicas de todos conocidas y con el fondo de la portada del Ayuntamiento de Andújar, este, hacía que Andújar Flamenca marcara un hito en estos actos.

Este año se ha realizado en el Teatro Principal de Andújar, marcó un reto para los fotógrafos debido a la iluminación que no era la más correcta, los contrastes de luces y sombras nos hicieron cambiar mediciones habituales hechas en otros años y ponerle algo de imaginación.

Afoan está comprometida en la celebración de Andújar Flamenca, y lo hace de la forma que sabe, difundiendo con sus fotografías este evento en apoyo de la cultura de nuestra ciudad.

© José Francisco Chamorro

© María del Carmen Cazalilla Herrera

© Fran Vicaría Rumín